Seis propósitos de año saludables y alcanzables

Seis propósitos de año saludables y alcanzables


Levanta la mano si alguna vez has hecho un propósito de Año Nuevo demasiado ambicioso (¡correr un triatlón! ¡Escribir un libro! ¡Viajar por todo el mundo!) Solo para perder de vista estos propósitos en febrero. Sí, definitivamente, has levantado la mano.

Así que sí, es hora de cambiar las cosas. La clave no es establecer grandes propósitos de Año Nuevo, ni siquiera establecer muchos. Sólo establecer los correctos. Los propósitos que vamos a sugerirte son lo suficientemente pequeños para ser factibles, pero lo suficientemente grandes para tener esa sensación de que todavía en marzo (¡o incluso en noviembre!) estamos consiguiéndolo.

1. Planifica tus entrenamientos semana a semana.

Piensa en tres o cuatro días de semana de deporte. Planifica una rutina de ejercicios de forma semanal. Aunque parece simple, al final se convierte en una nueva rutina de entrenamiento regular y constante. Para ello, siempre puedes ayudarte de un entrenador que te oriente para alcanzar tus objetivos.

2. Camina 1.000 pasos al día.

Puede ser algo tan sencillo como aparcar un poquito más lejos de la puerta. Caminar no sólo ayudará a mantener nuestro metabolismo funcionando, también es excelente para la salud del corazón, el cerebro o nuestras articulaciones. 

3. Dedica nueve minutos a despertar tu cuerpo.

Aunque sea dos veces por semana, dedícale tiempo por la mañana para hacer tres minutos para mover tus articulaciones: cuello, tobillo, círculos con la cadera. Esto mejorará nuestra movilidad.

4. Cambiar un alimento azucarado de nuestra dieta.

Quizá sea demasiado eliminar todo el azúcar que tomamos al día, podemos empezar por cambiar una de las galletas que tomamos al día por una manzana espolvoreada con un poco de cacao puro en polvo.

5. Tratar de dormir todos los días a la misma hora. 

Un estudio ha demostrado que incluso una hora o dos horas menos de suelo cada noche durante varias noches consecutivas, puede tener efectos en el cerebro que duran más que esos pocos días de descanso interrumpido. Asegúrate también de despertarte a la misma hora todos los días.

6. Regálate 30 minutos para ti a la semana.

Aliviar el estrés es un gran objetivo, pero es bastante ambicioso y difícil de alcanzarlo sino se identifica cómo hacerlo. De esta manera, puedes reservar 30 minutos a la semana para pasar un rato tranquilo haciendo algo con lo que realmente sintamos paz, tranquilidad y felicidad.